Como Decíamos Ayer...

6 STRING DRAG

Roots Rock'n'Roll

(The Royal Potato Family, 2015)

¿No os habéis reencontrado con un amigo al que hace siglos que no veis pero que al cabo de dos minutos de charla parece como si ayer os hubieseis tomado dos –o más- cervezas? Esos son los buenos amigos, los amigos de verdad, los que importan realmente. En esto de la música sucede lo mismo y este grupo es una muestra perfecta de ello porque son de los que no fallan. Tomando su nombre de una canción de los Stanley Brothers titulada “Five String Drag” lo dejaron hace 17 años, en el año 1998, tras publicar su segundo disco “Hit Hat” (E-Squared, 1997) y acabar de sentar la bases de esto que hoy conocemos como americana mientras en la vieja Europa sucedían las cosas que sucedían. Tras un par de carreras en solitario por parte de sus miembros se reúnen en 2.014 para celebrar el cuarenta aniversario de la creación de una disquera en Carolina llamada North Carolina’s Schoolkid Records y piensan "que bueno", que sigue habiendo química después de tantos años y que todavía tenían cosas que ofrecer aunque solo fuera refrescar la memoria al fan y al amigo. El caso es que se reúnen cuatro de sus miembros originales –Kenny Roby, Scotty Miller, Rob Keller y Ray Duffy- y paren en el otoño de 2.014 este gran regreso que se ha publicado ahora a principios de febrero de 2.015 en el sello Royal Potato Family Records (esto SÍ es un sello independiente). El disco me recuerda a aquél “como decíamos ayer” porque continúa el tema donde lo dejaron entonces; en ese exquisito rock de raíces que tan bien se les da y que hizo las delicias del género antes del overbooking al que nos vimos sometidos durante un tiempo largo, la verdad. Este disco es tan bueno ahora como si lo hubiesen publicado en 1999 y es un ejercicio de estilo, insisito, de rock de raíces que trae ecos de la Creedence mezclada con Buddy Holly y los Lobos más rockeros –por ejemplo-. Parece que Kenny Roby ha hecho un pacto con el diablo por aquello de que conserva la voz igual o mejor, si cabe, que en sus dos primeros discos hace la friolera de casi dos décadas y bueno, la banda es la banda; saben perfectamente lo que se hacen. Como “novedad” podemos señalar que se usa un poco más el tema de los vientos ahora y eso le regala un toquecito soulero que cumple con el dicho de que “lo poquito agrada y lo mucho enfada”.  Temas a destacar son el ametrallador comienzo con “Drive Around Town”, “Oooeeoooeeooo”, la maravillosa “Sylvia”, la trotona "Happier Times" o el tema que cierra el disco; “I Miss the Drive-In”. Que un grupo cierre un disco con un tema de esa calidad dice mucho del grupo y del disco –soy un apasionado del primer tema y del último de cada disco-. No pasará, obviamente, a la historia del rock pero es de los que te sacan una sonrisa al escucharlo y darte cuenta de las vueltas que has dado durante mucho tiempo para escuchar algo bueno cuando realmente lo tenías ante tus narices. Os recomiendo que os hagáis con alguna grabación en directo de las que pululan por ahí; veréis que no hay trampa ni cartón. ¿La Calificación? 8/10.