Casi un 10!

THE WATERBOYS

"Modern Blues"

(Harlequin and Clown, 2015)

La primera noticia que tuve de este disco era que se iba a grabar en Nashville y lo que esperaba es era un disco de música country. Pensé que el amigo Scott se había apuntado al carro del “americana” -cosa que por otro lado haría de miedo, seguro- pero no. ¿Un disco de Blues? Tampoco, ya que la única concesión que se hace al blues es el magnífico “Still a Freak”. Lo que sucede es que algo tiene esa ciudad, como el vino, para que la bendigan y se acabe viendo a Elvis en cada rincón. Lo primero que destaca de este disco es su inmediatez y en el hecho de que es más rock que folk; nada más empezar nos encontramos con el himno “Destinies Entwined”, que sirve para empezar un concierto a lo bestia o como encore perfectamente. Una vez que ha pasado el primer corte del disco te das cuenta de que estás ante un algo poco común en estos tiempos y en esto de la múscia; que es un disco de esos que sabes que te va a gustar a la primera y eso no siempre es malo. La verdad es que si este disco se hubiese publicado el año pasado estaríamos hablado de disco del año 2.014 o algo parecido porque temas como “November Tale” bien merecen la pena pararse una semanita a redescubrir toda la discografía The Waterboys; es un tema de los bonitos de verdad, de los que te hace sentir culpable por haber pensado que te sabías todo lo de Waterboys cuando realmente lo único que has hecho –confesémoslo- es destrozar “The Whole of The Moon” o “Fisherman’s Blues” a grito pelado. Si flipaste con “Rainy Day Music” de Jayhawks a la primera te aseguro que esto es igual ya que si un disco puede “gripar” el motor de un reproductor de cd este es de ese tipo de discos.

     La producción del disco corre a cargo del mismo Mike Scott y por eso el disco suena cien por cien a Waterboys –desde el principio al final-. Sí; es verdad que en el tema que cierra el disco, “Long Strange Golden Road” parece que se ha colado el Hammond a The Who pero bueno ¿hace mal un homenaje a The Who?. Precisamente el Hammond durante todo el disco ha desplazado el protagonismo de los violines pero nadie se ha muerto por eso. De hecho el duelo que mantienen el violín y la guitarra en “November Tale” es tremendo. La presencia de Jack Kerouac recitando algo de “On The Road” es todo un detalle para el mundo friki, la verdad.

     ¿La calificación? 9/10. Aquí el 10 está muy caro, la verdad.